El 12 de mayo de 2014 la ciudad se estremeció: el cadáver de la presidenta de la Diputación yacía sobre la pasarela que cruzaba todos los lunes de camino a la sede de su partido.
De inmediato, una sábana de rumores y especulaciones cubrió su cadáver. ¿Cuál, de sus muchos enemigos, podría tener más motivos para asesinarla? La Ilustrísima era una mujer odiada y temida. polémica, ambiciosa, sin pelos en la lengua, acaparadora de cargos, obsesionada por conocer los secretos de toda la ciudad y perseguida por la prensa, que comenzaba a husmear en sus amaños y componendas.
El morbo correrá desbocado por las calles lluviosas de una ciudad con los ojos y veneno en cada esquina, en cada ventana, descubriendo una trama de odio, celos enfermizos y secretos tejida durante años. Un relato coral, apasionante e irónico que nos habla de corrupción, de poder y de cómo este se acepta, o no, cuando quien lo ostenta es una mujer.
Mi opinión y lo que sentí
Cuando en #SoyYincanera se habló de hacer la lectura simultanea de "La Ilustrísima" de Marta Prieto, no tenía ni la más remota idea de lo que iba a caer en mis manos. Pensé que sería otra novela negra pero me equivoqué. Lo que tenía en mis manos era una novela social que recuerda el asesinato de la Presidenta Provincial de León, Isabel Carrasco, el cual tuvo lugar el 12 de mayo de 2014 a plena luz del día cuando caminaba sola por la pasarela sobre el rio Bernesga. Este hecho conmovió a la sociedad tanto de León como del resto de España. Pero no hay que equivocarse, la novela no se recrea en el asesinato de la Presidenta en sí, sino en lo acontecido anteriormente a través de unos personajes magníficamente construidos y con mucho peso. Lo que vivieron y como se sintieron, su comportamiento, sus decisiones, así como de las consecuencias que acarrearon el trabajar y gobernar con ella.
El abuso de poder, la ambición, la corrupción, la codicia, la manipulación, la coacción, la traición, el chantaje así como las apariencias y todo lo que se nos pueda ocurrir, tiene cabida en el juego de la política. Un juego sucio donde el sacrificio, los sueños y las esperanzas de muchos, quedan aplastadas. Y es que el poder corrompe, corrompe hasta límites insospechados, tanto que saca lo peor de muchos, hasta el punto de atravesar la línea y desembocar en hechos imperdonables.
He de confesar que he quedado encantada con los personajes. Como he señalado anteriormente, me parecen que están muy bien perfilados, con unas características muy bien definidas.
La Presidenta de la Diputación, Rosario Llamazares, odiada y temida por todos, ambiciosa, traicionera, amante del lujo, capaz de aplastar a cualquiera que fuese en contra de sus intereses. Longino, El Vicepresidente de la Diputación. Servil, casi lacayo, silencioso esperando su momento para escalar puesto y brillar. La Ordenanza, mujer observadora, el vivo ejemplo del "ver, oír y callar". Esperanzada en conseguir la plaza fija por la que ha luchado y abandonar la interinidad. Amante de la lectura y escritura. Helena, (con hache, para dar al nombre más caché), mejor amiga de Rosario hasta que "cayo en desgracia". Egoísta, altanera, manipuladora, amiga del lujo y de las apariencias, enmadrada. Maricruz, policía, amiga manipulable de Helena. Victoriano, Comisario Jefe y padre de Helena. Conformista, sin ninguna ambición, deseoso de jubilarse y vivir tranquilo. Encarna, madre de Helena. Ambiciosa, egoísta, decidida, siente vergüenza de su vida y de su marido. Obsesionada con el lujo, las apariencias, lo que yo llamo una "Marquesa de Villaquisiera". Enrique Mercader, Secretario Judicial, casado y amante de Maricruz...... Hay más personajes pero esos junto con otras peculiaridades de los ya mencionados, corren a cuenta del lector.